TORLA (HUESCA), 2 (EUROPA PRESS)
Cruz Roja ha atendido en su primera semana de actividad en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en el Pirineo de Huesca, a 44 personas con voluntariado que cubre los primeros auxilios sanitarios, tras haber sufrido algún tipo de lesión o percance.
Se trata de una actividad impulsada por Cruz Roja que da continuidad a la colaboración establecida por primera vez el verano pasado con el parque y en la que participan voluntarios de la entidad de diferentes comunidades autónomas hasta el próximo 31 de agosto para atender un puesto de primeros auxilios en la pradera de Ordesa, además de contar con socorristas en zonas especialmente concurridas y otras personas haciendo actividades medioambientales.
El operativo se puso en marcha el lunes, 25 de julio, y desde su inicio hasta el domingo 31 se ha atendido a una media de seis personas diarias, en su mayoría por causas leves. Del total de asistencias, solo cuatro han requerido traslado al centro de salud de Broto y una a los servicios del 061.
El responsable del proyecto, Fernando Sarvisé, ha indicado que las pequeñas heridas por caídas, golpes o cortes han sido las intervenciones más frecuentes, con un total de 16.
A estas les siguen las fracturas, los esguinces, el malestar general y los tirones musculares, con tres intervenciones cada una. También se ha asistido a dos personas por traumatismo, dos por ampollas, dos por vómitos y otras dos por picaduras. Y se ha realizado atención sanitaria por hipertensión, luxación, cefalea, dolor abdominal, sangrado nasal, lesión ocular y tendinitis, con un caso en cada dolencia.
Sarvisé ha declarado que a estas intervenciones hay que añadir la búsqueda de una persona desaparecida “y que, afortunadamente, fue encontrada sana”.
El responsable ha señalado, entre las actuaciones más complicadas, el rescate de una excursionista que había sido arrastrada por un torrente tras una intensa lluvia y que sufría una fractura. Asimismo, han atendido a dos montañeros que fueron transferidos por el helicóptero de la Guardia Civil, tras evacuarlos del punto dónde habían quedado enriscados.
INFORMACIÓN AMBIENTAL
El voluntariado de Cruz Roja está realizando de forma paralela una labor de sensibilización e información ambiental entre los visitantes que recibe el parque. El objetivo es que respeten y cuiden el entorno, a la vez que cumplen con la normativa.
A lo largo de la pasada semana, se han realizado más de 50 actividades, a partir de las cuales se ha podido detectar que, en general, el público “está cumpliendo las normas que rigen en el espacio protegido con más rigor que el año pasado, aunque aun se ven perros sueltos, pese a la prohibición y el problema que generan”, ha subrayado Sarvisé.
El responsable ha hecho un llamamiento a los visitantes para que no asuman riesgos innecesarios. Según ha comentado, “es frecuente ver a personas haciéndose fotos o vídeos junto a precipicios”, por lo que ha recordado la peligrosidad de hacerlo, así como de introducirse en ríos o arroyos, adentrarse en cuevas o realizar travesías sin el equipamiento adecuado. “Antes de adentrarse en Ordesa, recomendamos que se informen de las normas y los riesgos”, ha apostillado.
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