ORANTE (HUESCA), 26 (EUROPA PRESS)
Integrantes de la mayoría de las candidaturas que concurren a las próximas elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo en varias localidades las comarcas oscenses del Alto Gállego y La Jacetania han suscrito un documento en el que se comprometen con un “desarrollo adecuado” de las energías renovables en el territorio, que “garantice” la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones y “proteja nuestros paisajes, nuestra economía y nuestro futuro”.
También lo han firmado diversas entidades imbricadas en el tejido social de estas comarcas, con el objetivo de mostrar públicamente su compromiso colectivo con esta iniciativa, impulsada por la Plataforma en Defensa del Paisaje y la Vida en el Pirineo.
Con esta firma se reconoce y trata de garantizar para las próximas corporaciones que se constituyan tras las elecciones del 28 de mayo, la continuidad del consenso político logrado en los ayuntamientos, que refleja también la “potente y diversa implicación social” que este asunto ha generado y que, como fruto de esa colaboración, ha sido capaz de ofrecer reflexiones, alternativas y regulaciones específicas de “mucha utilidad” para el diseño de un modelo de desarrollo “compatible con las verdaderas necesidades”, indica el documento.
Un modelo, que sin duda –sostienen los firmantes–ha de pasar por poner todo el empeño “por adaptar el modelo energético, desde el ahorro y la eficiencia, hacia la implantación bien dimensionada -ordenada bajo control público– de la producción de energías renovables para el autoconsumo de las personas y todos los sectores productivos, respetuosas con el patrimonio natural y cultural, que eviten el impacto negativo sobre el paisaje y la economía”.
Estas premisas han posibilitado adoptar acuerdos esenciales que “no se deben desaprovechar”, pues son la “clave” para construir colectivamente un presente sostenible, prometedor y un futuro digno para las generaciones venideras.
LOS COMPROMISOS
Los firmantes, desde el ámbito que corresponda y la representatividad democrática que cada cual ostente en un futuro inmediato, se han comprometido a llevar a cabo cuatro líneas de acción.
La primera es defender, representar y mantener la esencia del consenso social y político logrado en las decisiones que hayan de adoptarse en las instituciones. Asimismo, abogan por favorecer el desarrollo de las normativas que refuercen un modelo que resulte coherente con lo ya avanzado.
La tercera es articular formalmente los mecanismos necesarios que faciliten la transparencia en la información pública y “garanticen” la participación ciudadana efectiva en la toma de decisiones que –aún siendo competencia de los órganos institucionales– “hagan posible la consulta y toma en consideración de las opiniones de la ciudadanía y las entidades que representan al tejido social”.
La cuarta y última pasa por instar desde la administración local a las instituciones de ámbito autonómico, estatal y europeo para que –en su marco competencial– decidan, regulen y legislen para “garantizar el necesario control y ordenamiento en la implantación de las energíasrenovables, con especial atención a la defensa de los territorios rurales y de alto valor ambiental, evitando las afecciones negativas de un desarrollo incontrolado y especulativo”.
ENCLAVE SIMBÓLICO
Este acuerdo se ha rubricado en un documento, denominado “El compromiso de Orante” al ser esta localidad oscense el lugar elegido para el acto y que tiene un gran simbolismo al ser el punto de encuentro del Alto Gállego y La Jacetania.
Además, ofrece una panorámica de las dos comarcas, siendo además el mejor enclave para observar gran parte de los terrenos que han sido “amenazados” por macroproyectos fotovoltaicos que afectarían a las tierras más fértiles de la Val Ancha y desde donde partirían las líneas de alta tensión de evacuación hacia la subestación de Biescas.
Precisamente, esta amenaza suscitó en su momento -hace casi dos años– una gran alarma social que hizo posible la movilización de numerosas personas y organizaciones muy diversas de las dos comarcas unidas entorno a la plataforma ciudadana encargada de organizar asambleas informativas, movilizaciones –tan potentes como las manifestaciones y tractoradas vividas en Jaca Sabiñánigo y Biescas- alegaciones, foros de debate e interesantes propuestas alternativas como el impulso a las comunidades energéticas de autoconsumo y la protección del paisaje y del sector agro-ganadero.
Este “necesario” debate social ha permeado también en los ayuntamientos de estas comarcas consiguiendo el acuerdo de todas opciones políticas representadas y que ha culminado, como un primer paso imprescindible, en la oposición unánime mostrada por el Ayuntamiento de Biescas a instalación de una nueva línea de alta tensión con graves afecciones y con la aprobación de una regulación urbanística que trata de frenar la “implantación masiva de macroproyectos fotovoltaicos” en los términos municipales de Jaca y Sabiñánigo.
Esta nueva normativa municipal, que modifica los PGOU –Plan General de Ordenación Urbana– de Jaca y Sabiñánigo, ha sido recientemente ratificada por el Consejo Provincial de Urbanismo del Gobierno de Aragón en su sesión de abril, otorgándole así total seguridad jurídica.
El documento “El compromiso de Orante” también lo han suscrito AEPAR, ACOMSEJA, Cooperativa Agrícola y Ganadera Santa Orosia, Ecologistas en Acción Sabiñánigo, Asociación de Amigos del Serrablo, Asociación Doña Sancha, Asociación Sancho Ramírez, Asociación O Zoque y Asociación E
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