En el Alto Aragón, la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) ha causado intensas lluvias y granizo, resultando en inundaciones en los pueblos de Perrarúa, Pomar de Cinca y Tormillo

HUESCA, 26 (EUROPA PRESS)

La DANA ha dejado lluvias intensas y granizo en muchos municipios del Alto Aragón, con hasta 100 litros por metro cuadrado en algunas localidades, así como inundaciones en Perrarúa, Pomar de Cinca, Tormillo o Monesma. El granizo ha provocado daños en centenares de hectáreas de cereal, vid y almendras.

Pomar de Cinca ha sido uno de los municipios más afectados, debido a la crecida del río La Clamor, donde han tenido que intervenir efectivos del SPEIS de la Diputación de Huesca. Las lluvias han anegado viviendas y obligado a la evacuación de dos familias, según ha confirmado la alcaldesa de Pomar de Cinca, Elisa Sancho.

Asimismo, Sancho ha explicado que el cauce de La Clamor “se ha desbordado, lo que ha provocado inundaciones e incluso han tenido que evacuar a personas de sus casas, porque cuando subió el nivel del agua ya no podían salir”.

Durante la jornada de este viernes, el nivel del cauce de La Clamor ha descendido, aunque Sancho ha admitido que las pérdidas serán cuantiosas.

“Hay daños en materiales particulares y en el Ayuntamiento, donde ha quedado inundado el local en el que se iban a hacer las elecciones este domingo. El parque infantil está levantado y la longitud de La Clamor que atraviesa el casco urbano está llena de escombros, el merendero también está lleno de agua. Esto es un desastre total”, ha lamentado.

Del mismo modo, los campos han quedado gravemente afectados por el agua. El presidente de la comunidad de regantes Val de Alferche, en Ilche, José Luis Romeo, ha resaltado la magnitud de estas tormentas y ha dicho que las espigas de las cebadas están golpeadas y han perdido parte de los granos, dependiendo de la zona, con más o menos afección”. En el caso de La Morilla hay campos con afecciones al cien por cien.

Las 7.000 hectáreas de la comunidad de regantes se han visto afectadas por las lluvias y el granizo, sobre todo en el entorno de Morilla y en la zona de Monte Odina. También algunas carreteras han quedado en mal estado.